¡Prepárense para una aventura deliciosa y muy particular! ¿Se imaginan que un día, mientras desayunan, un rinoceronte morado enorme aparece en su cocina y se come sus panqueques? Eso es justo lo que le pasa a Dalia, una niña que intenta contarle a sus padres sobre este invitado tan especial. El problema es que ellos siempre están súper ocupados y no la escuchan, ¡ni siquiera cuando se trata de un rinoceronte comelón de crepes! Así, Dalia encuentra en este singular amigo morado a alguien con quien hablar y compartir sus cosas, mientras el rinoceronte disfruta de un festín. Este libro, lleno de humor y ternura, nos invita a reflexionar sobre la importancia de la atención y la comunicación en familia. Es un recordatorio cariñoso para padres y madres sobre escuchar a sus hijos, incluso cuando lo que cuentan parece increíble o muy, muy "rinoceronte". También celebra la imaginación y cómo los niños encuentran maneras creativas de lidiar con el mundo a su alrededor. Leer "Mi rinoceronte también come crepes" es una oportunidad fantástica para que niños y adultos conversen sobre la importancia de prestar atención y de valorar el tiempo juntos. Su lenguaje sencillo y las ilustraciones vibrantes lo hacen perfecto para los más pequeños, y su mensaje universal resuena profundamente en las familias chilenas, invitándonos a bajar un poco el ritmo y a conectar de verdad. ¡No se lo pierdan!